Ahora es el momento

José Palacios

Estamos en la antesala de una crisis que volverá a marcar otra época de nuestras vidas. Intentaremos resumir lo que a nosotros cómo hosteleros y hoteleros de Cullera nos espera de cara a los próximos años, y que esperamos que cada sector productivo haga lo mismo con el fin de intentar ayudar al Consistorio en la toma de decisiones y el mejor entendimiento de las cosas.

La vuelta al trabajo estará llena de incógnitas que iremos descubriendo poco a poco, pero hay algunas, las económicas y de empleo, que ya nos atrevemos a vaticinar.

Varios apuntes cortos y precisos

El COVID-19 traerá un verano más corto en su versión turística, menos turistas y menos ingresos. Estos son hechos que todos sabemos, ya que la pérdida de ventas en estos momentos llega al 20% de lo que es la facturación anual en nuestros establecimientos. Las consecuencias inmediatas serán y se irán dando de forma secuencial, resumiendolas de la siguiente manera: Menos ventas = a bajada de precios = a competencia desleal = a pérdida supersónica de rentabilidad = perdidas de empleo = alargamiento del periodo de crisis = vuelta a empezar, todo esto sumado a los autónomos y trabajadores quee se quedaran en el camino.

Está crisis no durará menos de 3 o 4 años, y aunque las industrias tradicionales se recuperan antes, recuperar la confianza en nosotros mismos y la de nuestros turistas será una cuestión de todos y cada uno de los que formamos parte de la gran familia del turismo.

Estos son momentos excepcionales, la crisis no ha merodeado un año a nuestro alrededor, sino que ha llegado en una semana y ha golpeado con toda la fuerza posible. A momentos excepcionales se requieren medidas excepcionales. Ahí es donde veremos el talante de cada uno de nosotros y el de nuestro Ayuntamiento.

No planteamos medidas económicas, para eso están los representantes de los distintos subsectores del turismo, pero si haremos algunas apreciaciones de carácter promocional que entendemos que hay que poner en marcha de forma inmediata. Una gran parte del turismo que se perderá en España será el internacional, por lo que la promoción se centrará ahora en el turismo nacional, y la batalla por ganar adeptos se concentrará en las redes sociales. Los visitantes de nuestra localidad se reparten aproximadamente en los siguientes porcentajes: un 40 % de nuestros visitantes corresponden a las 2 Castillas y la Comunidad de Madrid. Un 40 % se concentra en la provincia de Valencia y un 20 % se reparten entre el turismo internacional y el resto de Comunidades Autónomas. Es por esto que en las comunidades autónomas en las que entendemos que habría que poner un énfasis especial son aquellas que forman parte de nuestro norte peninsular, que es dónde se ha detectado un aumento de turistas en los últimos años.

Hace solo unos días estábamos inmersos en planificar el futuro de nuestra promoción turística y avanzar en situar a Cullera en el Top-Ten de ciudades DTI. Podemos asegurar que la calidad turística pasa por esos conceptos en nuestra ciudad:

  • Recursos Naturales y Patrimonio
  • Marca gastronómica diferenciadora
  • Medio ambiente y sostenibilidad
  • Comercio online competitivo
  • Big data

Este último representa un recurso que los empresarios necesitamos si queremos acceder a una oferta diferenciadora y competitiva.

Por todo esto, nos gustaría definir algunas líneas maestras que puedan ser positivas para el desarrollo a corto plazo de nuestra ciudad y que creemos se deberían empezar a implementar justo en el momento que termine el confinamiento debido a la crisis del COVID-19.

1. No dar un paso atrás en las propuestas en las que trabajamos en colaboración turismo-empresarios.

2. Empezar de forma urgente las promociones online como destino global, serio y fiable, sin estridencias difíciles de cumplir pero con contundencia y sobriedad.

3. Reforzar con políticas de imagen la profesionalidad de nuestros establecimientos y la de nuestros trabajadores, siempre en proceso continuo de evolución profesional (club de producto).

4. En nuestro relato de ciudad, no puede faltar uno de los activos turísticos más importante y que no es otro que la gastronomía y su especial singularidad: el arroz (somos Cullera, capital gastronómica del arroz). La calidad no es un concepto que se pide, es un concento que debemos demostrar.

5. Reforzar la promoción hotelera y extra hotelera, ya que podemos estar en un año de ocupación por debajo de lo deseable.

6. Somos una ciudad acogedora, familiar, y que reúne lo mejor de un ciudad cosmopolita y un pueblo entrañable y saludable. Esto debe convertirse en factor diferenciador de nuestra oferta.

7. Debemos hacer participes a nuestros seguidores en redes sociales de nuestras propuestas con ofertas que faciliten su participación en nuestras campañas, como alicientes y regalos promocionales, breves, y efectivos para que faciliten la participación. Ejemplos:

  • 50 paquetes de alojamiento para dos personas en Cullera , de Domingo a Jueves, a media pensión, Alojamiento más desayuno y comida o cena en restaurantes.
  • 200 menús para dos personas repartidos en restaurantes participantes…esta propuesta habría que desarrollarla entre hoteles y restaurantes a través de sus representantes oficiales, el comercio podría unirse con propuestas específicas.

8. Continuar promoviendo acciones que contribuyan a alargar la temporada apoyándonos en los fines de semana del resto del año con campañas dirigidas al entorno cercano de nuestro destino, y con alicientes sustanciosos para nuestros visitantes que se podrán encontrar una vez en el destino. Estos alicientes deben nacer de las empresas de nuestro destino en negociación con el Ayuntamiento.

En cualquier caso, este es un planteamiento personal, que solo buscan ayudar a visualizar la situación actual y ayudar a mejorar el futuro más cercano.