El Partido Popular de Cullera pasa de ser el segundo grupo municipal más votado en las elecciones de 2019 a la cola de la clasificación, quedándose con un solo concejal y en zona de descenso.
El concejal y anterior líder de los populares de Cullera renuncia a su lugar en el partido y pasa al grupo de no adscritos
Juan José Grau, número 1 del Partido Popular de Cullera en las elecciones de 2019 ha renunciado al partido y pasa al grupo de no adscritos para lo que queda de legislatura. Un hecho que deja en la precariedad más absoluta a los populares de la ciudad, descabezados en el pleno municipal y con una imponente división que puede comportar una evidente y completa fractura electoral.
Las elecciones de 2019 daban un pronóstico complicado para los populares, ya que las encuestas vaticinaban ninguno o un sólo concejal debido a su pésima situación. Contra todo pronóstico Grau triplicó las expectativas y alcanzó un resultado de tres concejales contra pronóstico.
A partir de los meses siguientes a la constitución del nuevo pleno en junio de 2019, ya empezaron a observarse conflictos internos y división entre los afiliados y militantes. Una problemática que siguió desde los meses posteriores hasta la actualidad, y que ha abocado en la inacción política del partido y su fragmentación en el pleno con un edil expulsado del grupo municipal (Christian Cuenca) y otro renunciando al partido y a su cargo de portavoz del mismo en el seno de la política local (Juan José Grau). Una división interna que genera desconfianza entre los votantes de los populares.
Tras multitud de conflictos el ya ex-portavoz de los populares en el pleno de Cullera ha decidido renunciar a su cargo y a su lugar en el grupo pasando al de los no adscritos y conservando su acta de concejal al margen del Partido Popular.
Con la marcha de Grau los populares se quedan con un sólo concejal en el ayuntamiento de Cullera (Fernando Sapiña). Con ello, el PP ha pasado de ser el líder de la oposición a ser el último grupo municipal en el consistorio, todo ello bajando del segundo escalón al quinto. Una sangría que no ha parado en los últimos años. Cabe recordar que el PP no ha parado de bajar votos desde que obtuvo 15 concejales en 2007. Desde 2011 hasta hoy en día ha pasado de gobernar con mayorías absolutas a tener solamente un representante en el pleno. Una huída de votos y de simpatizantes.
Con la marcha del portavoz Grau a los populares solo les cabe esperar que el único representante que tienen en el pleno conserve su acta y que de tres, antes de las elecciones de mayo, les quede uno.
Habrá que esperar a los próximos días para ver en que situación queda el PP de Cullera y si puede salir o no de la UCI en la que se encuentra ahora mismo.